El Dr. Craig Tendler es vicepresidente de Asuntos Médicos Mundiales y de Desarrollo en Etapa Avanzada en Oncología, Hematología y Cuidados Paliativos de Janssen Research & Development, LLC. 

Hace algunos años, en la facultad de medicina, me di cuenta de que quería convertirme en oncólogo pediátrico. Siempre había querido ayudar a los niños, pero la posibilidad de ayudar a los más necesitados, que se enfrentaban a enfermedades para las cuales no había cura, alentó mi determinación. 

Mis amigos, familiares y pares cuestionaron mi decisión, preocupados por el hecho de que la carga emocional sería un desafío. Pero sabía, incluso entonces, que también había esperanzas de euforia: llevar alegría sin igual a familias al salvar la vida de un niño. 

Tengo la fortuna de haber sido parte de muchos de esos momentos de euforia. Recuerdo a un niño que traté cuando este tenía cinco o seis años. Se había enfrentado a un cáncer agresivo en la sangre, pero logró la remisión con la ayuda de tratamientos revolucionarios. La montaña rusa emocional de contratiempos fue difícil, pero la alegría y el alivio prevalecieron: sobre todo, quizás, cuando su madre llamó para decirme, después de una década, que lo habían aceptado en la universidad de sus sueños. La posibilidad de tener un impacto tan profundo en las vidas de otras personas y mi pasión para encontrar mejores resultados para todos los pacientes se reafirmaron con cada uno de estos momentos especiales.

Cuando me involucré en la industria de las ciencias de la vida, pensé que me distanciaría de algunas de las experiencias con pacientes que estimularon mi pasión.  En lugar de eso, encontré colegas en cada parte de nuestra organización con una motivación igual a la mía. Esta pasión compartida por ayudar a las personas y encontrar soluciones (tratar de encontrar la sensación de satisfacción que se siente al transformar las vidas de los pacientes) es la piedra angular de nuestra cultura en Janssen. Todas las personas que forman parte de nuestro equipo, desde científicos hasta profesionales, tienen una historia personal que los motiva e inspira profundamente. Compartimos esa pasión porque compartimos un vínculo fundamental: el cáncer nos ha tocado a todos.

El 4 de febrero, cuando conmemoramos el Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer, recuerdo el papel esencial que todos desempeñamos en busca de tratamientos que cambien la vida de personas diagnosticadas con cáncer. En Janssen, todos los días luchamos por nuestra pasión: curar el cáncer.  ESTOY motivado por el progreso que hemos hecho y LUCHARÉ con orgullo junto a cada miembro de nuestro equipo y de la comunidad mundial de la lucha contra el cáncer para avanzar aún más hacia la cura.